Electroterapia

La electrotermia es una técnica terapéutica que combina dos formas de tratamiento: la electroterapia y la termoterapia. Ambas modalidades se utilizan con el objetivo de aliviar el dolor, reducir la inflamación y promover la recuperación en diversas condiciones musculoesqueléticas.

Electroterapia: En este contexto, la electroterapia implica el uso de corrientes eléctricas de baja frecuencia para estimular los tejidos y los músculos. Estas corrientes pueden ayudar a reducir el dolor, mejorar la circulación sanguínea, y favorecer la función muscular. La electroterapia puede aplicarse de diversas maneras, como a través de electrodos colocados en la piel en la zona afectada.

Termoterapia: La termoterapia, por otro lado, utiliza calor para tratar lesiones y afecciones. La aplicación de calor tiene varios beneficios, como la dilatación de los vasos sanguíneos, que aumenta el flujo sanguíneo y la entrega de oxígeno y nutrientes a la zona afectada. Además, el calor puede relajar los músculos, mejorar la flexibilidad y reducir la rigidez articular.